Recepción y almacenamiento

Protocolo realizado por Jose R Sañudo. Editado y revisado por última vez en Abril 2021 por Sara Quiñones.

En cuanto a la recepción y almacenamiento del donante, se deben seguir los siguientes pasos que iremos nombrando a continuación:

Entrada por la puerta de “acceso de cadáveres” del Centro de Donación de cuerpos y salas de disección (CDCYSD), situada en la planta baja del Pabellón V, y recepción por dos técnicos
Desde esta actividad, y en adelante, los técnicos están protegidos con los siguientes Equipos de Protección Individual (EPIs):

Máscara facial marca 3M, serie 6800, modelo 6899T, con filtro 3M CE0086-A2B2E2K2P3R, que protege la cara completa, incluidos los ojos.
Mandil de neopreno.
Guantes de PVC que protege para riesgo mecánico, químico y biológico.
Botas de seguridad S5 del clase II todo goma o todo polímero con suela antideslizante y puntera de seguridad.
Mascarilla buconasal con filtros A2B2E2K2P3R para tareas que lo requieran junto con gafas de seguridad contra proyecciones o salpicaduras.
Gafas de seguridad de montura integral, que protege de salpicaduras y proyecciones
Guantes de neopreno de protección de riesgos mecánico, químico y biológico de 40cm de largo si necesitan sacar material de depósitos, etc.
Pantalla facial completa para riesgo de salpicaduras o proyecciones de partículas
Guantes de resistencia al frío para trabajos en la cámara frigorífica. Incluye resistencia mecánica al corte y punción, resistencia química y biológica.
Los trabajadores además usarán, si lo necesitan, manguitos de plástico hasta el codo, gorros de protección del pelo y ropa de trabajo adecuada tipo pijama completo, y prendas de abrigo. Los Servicios de Prevención, en nuestro caso, el Servicio de Prevención de la UCM proporcionará información completa de los EPIs mencionados, la gestión de los mismos en cuanto a adquisición, entrega, mantenimiento y sustitución (según el Procedimiento PRL-GP 003 para la gestión y uso de equipos de protección individual) y ofrecerá muestras comerciales de los tipos de EPIs mencionados para que el CDC&SD tenga información suficiente y adecuada.

Colocación del cuerpo en la mesa de autopsias de la sala de inyección del Departamento.
Antes de iniciar el procedimiento de embalsamamiento se extraen 10 cc de sangre venosa del cadáver. El vial se ubica en su correspondiente contenedor y se envía urgentemente al laboratorio para un análisis serológico (VIH y hepatitis B/C).
A continuación, se pone en marcha el sistema de ventilación/aspiración con el que cuenta la sala, que extrae los gases producidos durante el proceso de inyección. Durante todo el proceso están presentes al menos dos técnicos equipados con los EPIs mencionados necesarios según la tarea. Tienen perfectamente ubicada la presencia del teléfono para las posibles emergencias. Se procede a comprobar que la bomba de inyección funciona adecuadamente, que la solución embalsamadora está preparada y apta para su uso, (habiendo agitado el bidón para que la mezcla sea homogénea) y que el instrumental necesario está preparado y convenientemente ubicado en una batea pequeña al efecto. Se verifica que el bidón de residuos está conectado al tubo de drenaje de la mesa inyección.
El cadáver es despojado de las posibles vestimentas o sudario que lo envuelva, depositando éstas en una bolsa adecuada para la eliminación e incineración, y se inspecciona la superficie cutánea en busca de posibles escaras u otro tipo de lesiones. Confirmado que el cadáver reúne todas las características de aptitud para iniciar el procedimiento se pasa a la siguiente fase.
Afeitado y lavado completo con jabón bactericida fuerte. El cabello y pelos se eliminan también en la bolsa para la incineración posterior.
El embalsamamiento se realiza en dos fases: venosa y arterial (En Donación - Embalsamiento).
El embalsamamiento se asegura con la inyección local de solución embalsamadora: con una aguja conectada a una bomba de perfusión se inyectan pequeños volúmenes de solución en las siguientes regiones: manos y muñecas, pies y tobillos, regiones poplítea, genital, glútea, pectoral, hombro. Para completar la inyección en el encéfalo y las órbitas se introduce la jeringa en el ángulo interno del ojo, se empuja hasta el fondo de la órbita para acceder al encéfalo y liberar medio litro de solución en varias inyecciones. Finalmente, proceder en la limpieza.
Segunda limpieza del cadáver: se realiza un segundo lavado, con agua y jabón bactericida, para eliminar los posibles restos de líquido embalsamador.
Almacenamiento provisional: el cadáver permanece en la sala de inyección durante las 48 horas posteriores a la perfusión. Caso del que el análisis serológico confirme que porta un virus contaminate (VIH o Hepatitis B /C) se elimina el cadáver por la vía normal (ver punto 7)
Almacenamiento definitivo: se embolsa el cadáver en un saco de polietileno transparente para poder vigilar siempre su estado de conservación. Se cierra el saco mediante cordón resistente y se añade la etiqueta con los códigos de identificación correspondientes. Si el cadáver porta alguna prótesis, se recoge la información en la etiqueta. Para que los técnicos reconozcan esta situación, la etiqueta tiene un color diferente al resto de etiquetas. Embolsado, se traslada a la cámara de almacenamiento de cuerpos, a una temperatura de entre 10 y 11ºC, que cuenta con el sistema de extracción indicado en el punto 2.3. Para este traslado, los trabajadores emplean una camilla/grúa hidráulica, que se sitúa a la altura de la mesa de inyección, permitiendo el paso del cuerpo a la misma y luego su elevación hasta el puesto de almacenamiento en el estante correspondiente.
Protocolo de congelación de un cadáver. Mediante la camilla/grúa hidráulica se deposita el cadáver en la cámara de congelación a -21ºC. Los trabajadores para esta tarea portarán ropa de trabajo para el frío y los siguientes EPIs: guantes de resistencia al frío que incluye resistencia mecánica, química y biológica. Un cadáver puede congelarse para mantenerlo hasta un proceso de fijación posterior, según se detalla en los apartados anteriores.
Limpieza y ordenación del instrumental utilizado durante la actividad realizada, así como limpieza de la mesa de embalsamamiento, otros utensilios y suelo de la sala. Debe quedar limpia y ordenada para un nuevo proceso de embalsamamiento.